miércoles, 28 de abril de 2010

Lirio


He decidido escribirte, cobardemente.
te fuiste y yo te sigo…
Mi pensamiento es tuyo
desde la tarde buena cuando te vi.

Ahora sólo queda esto:
un verso lacónico,
algo pequeño que no alcanza, pero desmuestra,
lo que eres para mí;
una percepción tácita,
un gusto inalcanzable.

Si lucho por ti, no me querrías.
Si lucho con él, me odiarías.
¿Qué puedo hacer?
Resignado dejaré de cansarte,
si quieres, por siempre podré amarte.

No me odies, si mi afán, es quererte
sólo anhelo poder verte.
Eres una guillotina,
pues pierdo la cabeza por ti.

¿Será la última vez?
Contigo no existe el tiempo,
eres activa y cariñosa,
soñadora, jocosa, sincera.
Existes, sólo tú respondes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario